La menopausia supone un antes y un después en la vida de la mujer con una serie de cambios que suponen nuevos desafíos.
Durante la menopausia, el organismo debe ajustarse a la disminución de la producción de hormonas y es posible que aparezcan una serie de síntomas o efectos secundarios a los que la mujer irá adaptándose poco a poco.
Aunque los síntomas más conocidos suelen ser los sofocos o los cambios de humor, la menopausia también tiene impacto negativo en la salud visual de la mujer.
Desde Kroma queremos ayudarte a que estés plenamente informada sobre los posibles cambios que sufrirá tu visión debido a la menopausia, por ese motivo hoy queremos hablarte de cómo afecta la menopausia a la vista.
¿Por qué afecta la menopausia a la vista?
Es habitual que las mujeres experimenten cambios en la visión a lo largo de su vida adulta debido precisamente a los cambios en las hormonas debido a la influencia hormonal de los anticonceptivos, embarazo y menopausia.
La menopausia afecta a la visión fundamentalmente debido a las fluctuaciones hormonales características de esta etapa ya que la disminución de los niveles de estrógenos y progesterona puede tener diferentes efectos en los ojos de la mujer:
- Las hormonas contribuyen a la formación de lágrimas, por lo que la reducción hormonal puede llegar a ocasionar un ojo seco.
- El estrógeno puede hacer que la córnea sea menos rígida, más elástica de forma que afecte a la forma en que se desplaza la luz hacia el interior del ojo provocando una mayor sensibilidad ocular.
- El resecamiento y el cambio refractivo pueden producir visión borrosa y también podría llegar a dificultar el uso de lentes de contacto.
¿Cuáles son las afecciones más comunes durante la menopausia?
Algunos de los problemas de visión a los que puede enfrentarse una mujer cuando entra en la etapa de la menopausia son:
- Ojo seco
El síndrome del ojo seco es uno de los efectos más habituales de la menopausia en la vista de las mujeres. Debido a la disminución de los niveles de estrógeno y progesterona en el organismo las glándulas lagrimales pueden verse afectadas y se reduzca la producción de lágrimas.
Tener una buena lubricación ocular depende básicamente de las lágrimas que protegen la superficie ocular.
Sufrir sequedad ocular puede ocasionar irritación, picazón, ardor y sensación de arenilla o cuerpo extraño en los ojos.
Este efecto de la menopausia puede subsanarse utilizando algún lubricante ocular como lágrimas artificiales o colirios que tengan una base de ácido hialurónico. El mejor formato sería en gel y debería aplicarse por las noches.
También es importante no abusar del uso de pantallas, lentes de contacto, maquillaje y se aconseja evitar ambientes secos, con aires acondicionados y proteger los ojos del viento y del sol.
- Cambios en la superficie ocular
Una sequedad ocular crónica puede dañar la superficie de la córnea y la conjuntiva pudiendo ocasionar la aparición de problemas visuales como visión borrosa, fluctuante o inestable.
La visión borrosa es la pérdida de agudeza visual que suele afectar a ambos ojos, aunque en ocasiones se ha comprobado que solo afecta a uno de ellos. Algunas mujeres notan cambios en su agudeza visual, afectando negativamente a la calidad de su visión de cerca o de lejos.
Si este efecto ha sido ocasionado por la fluctuación hormonal típica de la menopausia, la visión borrosa puede desaparecer una vez los niveles hormonales se estabilicen.
Es importante acudir a un profesional oftalmólogo siempre que se note visión borrosa, que la calidad de visión ha empeorado o si se percibe alguno de los siguientes síntomas:
- Cortina o velo oscuro.
- Visión doble.
- Dolor ocular
- Pérdida de visión periférica.
- Cambios en la visión
Se ha observado que algunas mujeres experimentan cambios en su visión durante la menopausia que pueden deberse a cambios en la forma del cristalino del ojo, el responsable del enfoque de la luz en la retina.
Esta alteración en el cristalino puede afectar a la capacidad del ojo para enfocar objetos independientemente de si están cerca o lejos.
Este cambio en la visión puede atajarse con el uso de lentes que corrijan el defecto en la visión de cerca o de lejos.
- Mayor sensibilidad a la luz
La disminución en la producción de estrógeno en el organismo puede provocar que la mujer perciba la luz de manera diferente, ya que esa pérdida hormonal afecta a la rigidez y elasticidad de la córnea.
Hay mujeres que experimentan una mayor sensibilidad a la luz, de forma que la exposición a luces brillantes o la luz solar directa puede ser incómoda.
En este caso pueden utilizar gafas de sol en exteriores o fotocromáticas, para que los cristales se adapten a los cambios de luz y proteger así los ojos.
- Riesgo de Degeneración Macular
La menopausia está también relacionada con un mayor riesgo de desarrollar degeneración macular asociada a la edad, que afecta a la visión central y la agudeza visual.
Aunque esta afección no puede prevenirse sí que es importante acudir a revisiones oculares periódicas a partir de los 45 años.
¿Pueden prevenirse los efectos de la menopausia en la vista?
Aunque la menopausia no puede evitarse y es muy probable que tenga efectos en la salud visual de la mujer, pueden seguirse unos sencillos consejos que pueden prevenir que los efectos sean peores:
- Mantener unos buenos hábitos alimenticios, incluyendo antioxidantes y ácidos grasos omega 3.
- Beber agua suficiente para contribuir a la hidratación ocular o utilizar lágrimas artificiales o gotas oftálmicas.
- Proteger los ojos del sol con unas gafas de calidad que bloqueen los rayos UV.
- Evitar sustancias nocivas como el tabaco y el alcohol.
- Mantener un peso saludable.
Además de estos consejos, el más importante es consultar a un profesional en cuanto notes cualquier cambio en tu visión, sobre todo a partir de la menopausia y seguir sus indicaciones.